El CBV (Concrete Batching Vehicle) es un sistema que transforma una tradicional mezcladora autocargante en un auténtico sistema de mezclado móvil, que permite producir directamente en la obra hormigón de calidad certificada en todo ambiente y situación. Gracias al control electrónico del proceso de dosificación y mezcla, este sistema innovador permite certificar la calidad del hormigón y garantizar que el operador produzca partidas homogéneas de hormigón respetando las más exigentes fórmulas de mezcla. El CBV constituye una solución móvil que no requiere el empleo de recursos adicionales (personas/máquinas) para obtener hormigón de calidad certificada.
La tecnología y los dispositivos electrónicos implementados en los vehículos CBV constituyen un sistema integrado que permite al operador eliminar errores humanos: permite programar y almacenar hasta 20 recetas de hormigón, medir la cantidad exacta de componentes, controlar el tiempo de mezcla, diagnosticar la conclusión del proceso de mezcla, compensar el nivel de humedad en los áridos y añadir hasta dos aditivos. Por su parte, el sistema de pesaje tradicional de las mezcladoras autocargantes opera simplemente como “balanza”, es decir que permite controlar la dosificación de la partida, proyectando así una idea engañosa en cuanto a poder controlar la calidad del hormigón.